martes, 7 de octubre de 2014


QUE PODEMOS HACER PARA MEJORAR NUESTROS RESULTADOS?
Algunas de las recomendaciones que vas a leer a continuación son muy conocidas y te la han contado en muchas ocasiones.
¿Qué hacer?
  1. Partimos de la base siguiente: las clases son imprescindibles, esto es debes estar atentos a las explicaciones. Las presentaciones que usa el profesor están siempre a tu disposición para luego trabajar con ella
  2. La parte explicada en clase se corresponde con otra en el libro. El trabajo de ese día consiste en leer (insisto en leer no memorizar aún) esa parte e intentar resumirla en forma breve o bien a través de un esquema, como te resulte a ti más cómodo. En cada sección explicada hay una serie de actividades de aplicación que serán los deberes que te dejará tu profesor. Recuerda que las actividades no sólo implican “encontrar la respuesta y copiar”, debes saber donde buscar y leer bien la pregunta para entender bien la respuesta que debes dar. Apunta las dudas, ideas o reflexiones que hayas hecho durante ese estudio. Luego las preguntas en clase. En relación a las actividades finales que en cada tema trabajamos y que os y puntúo, están pensadas para que las trabajéis en grupo y no para copiarlo de un compañero/a en el último momento. Así no sirven de nada. Para hacerlas, leed el resumen o esquema general del tema para poder localizar luego lo que os preguntan.
  3. Sabes que en esta asignatura se trabajan con muchos nombres, si has hecho tu trabajo diario (por cierto, te requiere 2—4 horas semanales, y no siempre) cuando llegue el momento de la prueba tendrás que dedicarle menos tiempo y la memorización (que es ahora cuando hay que hacerla) te será mas fácil.
  4. No memorices directamente las frases del libro, usa los esquemas y resúmenes que has hecho antes. Recuerda que en la presentación que usamos en clase, la información está ya resumida, puedes usarla como base del estudio.
  5. No memorices lo que no entiendas. Esta frase es vital, la memoria busca siempre elementos de referencia y memorizar términos sin entenderlos es difícil y además te va a durar muy poco. Por eso la información se analiza y se trabaja en clase donde el profesor os lo explica y detalla.
  6. No dejes el trabajo para última hora. Esta frase también la habrás escuchado infinidad de veces. Es verdad que vuestra falta de madurez os lleva a entender el tiempo de otra manera que a los adultos, pero no es excusa puesto que os lo decimos muchas veces. Sabes que al final del tema nos ponemos de acuerdo en la fecha de la prueba a realizar. Prevelo con tiempo y reparte la cantidad a estudiar en varios días.
  7. Ten siempre una idea general del tema a estudiar. Es conveniente que hagas un esquema en el que aparezcan las ideas principales. En este sentido, puedes usar la página que viene en tu libro de texto o bien ser tu mismo quien la elabore. Esto también es importante hacerlo poco a poco.
  8. Sabes que funcionamos por bloques de unidades y es por eso que arrastramos temas. Se previsor y repasa las preguntas que hemos hecho de los temas anteriores y que luego os he preguntado en la prueba. Repasa el examen corregido es una buena forma de repaso. Recuerda además que en cada tema hay una serie de ideas clave principales, muchas de las cuales se repiten mucho y os advierto de ellas. Estudiadlas.
  9. Se ordenado, sigue estas recomendaciones y plásmalo en tu cuaderno. Piensa en aprender y no solo en aprobar, muestra interés y curiosidad. Recuerda que todos los días hay algo nuevo que aprender y vuestro cerebro está en las condiciones idóneas para recibir la información, claro que siempre y cuando vosotros queráis. Recuerda que para que el trabajo tenga su fruto debes ser constante y usar tu cerebro para pensar. Cuando haces las actividades no te limites a copiar lo que pone tu libro, piensa en qué pone y qué es lo que te quiere decir.
  10. Sobre los trabajos puedes entregar los que se te ocurran del tema que estemos tratando, pero procura ser original, y para ello necesitas reflexionar un poco sobre lo que quieres hacer


El sosiego, el lugar apacible, la amenidad de los campos, la serenidad de los cielos, el murmurar de las fuentes, la quietud del espíritu son grande parte para que las musas más estériles se muestren fecundas y ofrezcan partos al mundo que le colmen de maravilla y de contento”
(Prólogo del Quijote)